lunes, 3 de agosto de 2009

Saturno devorando a sus hijos

De lado inferior derecho, esta la pintura "Saturno devorando a sus hijos", de Francisco Goya
me parece absoluta y contundente, aquí un breve ensayo.

Saturno devorando a sus hijos, va mas allá de ver a un ser terrorífico devorando un cuerpo humano, creo es una analogía de lo que nos pasa a todos cada día, es que Saturno es Cronos, el mismo Cronos que todos conocemos el dios del tiempo, y es que en la mitología cronos devoraba a sus hijos uno a uno, cada hijo de cronos era un dios, esto describía que antes que Zeus Hades y Poseidón, los dioses eran devorados por el tiempo, lo cual significaba que envejecían y morían, cuando Zeus con sus otros hermanos vencen a Cronos es claro que se volverían unos seres inmortales e intemporales, después de ellos todos los dioses serían así ya que la descendencia divina de estos tres quedaría libre de Cronos, nosotros lo humanos nunca vencimos a cronos, es por eso que nacemos envejecemos y morimos, ¿acaso cada día no somos más viejos?, veamos una foto de nosotros cuando éramos niños, cronos nos ha hecho crecer y desarrollarnos para después devorarnos, haciéndonos viejos hasta que acaba con nosotros y terminamos muriendo, nosotros no hemos vencido a cronos, no somos intemporales, tampoco inmortales.
Veamos la pintura, es el tiempo que termina con nosotros, el tiempo que no es más que una percepción humana, las otras especies saben del tiempo, saben de él cuando emigran cuando se aparean, cuando saben que deben salir de sus refugios, es cronos que convive con los seres de la tierra que invita a las especies a nacer vivir y morir, es cronos que las invita a salir de sus madrigueras, que las impulsa a viajar y que les indica cuando deben procrear, es cronos, que bajo la imagen terrible de la pintura, nos muestra sus efectos.
Cronos terrible pero sabio, acabará con todo lo que conocemos, es cronos en la pintura llamado Saturno.

1 comentario:

  1. Esta es una de mis pinturas favoritas, me encanto el ensallo. Felicidades!
    Dios perdona, el tiempo no.

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